Las personas relacionales y el centro del corazón

A las personas cuya energía está centrada en el corazón suele importarles mucho la imagen que proyectan. Por eso las relaciones son muy importantes. De una u otra manera, valoran mucho las emociones, principalmente las que les conectan con los demás, como la ternura y el afecto.

Son personas competitivas que se están comparando con los demás todo el tiempo, especialmente en la imagen que proyectan y cómo es percibida por los otros. De allí que tiendan a adaptarse a su medio: son como el agua, que adopta la forma del envase que lo contiene.

Ante el conflicto quieran buscar que todo se solucione pronto, “tener buen rollo”. Se apartan de las emociones “negativas”, especialmente la rabia, que sienten pero prefieren reprimir y no expresar para no dañar su imagen de bondad. Por eso suelen ser personas que les cuesta mucho decir que no, todo lo contrario de los viscerales.

Se les dificulta la soledad, parece que todo está relacionado con otras personas. De hecho, son bastante activos e incluso hiperactivos. Valoran mucho la amistad y las relaciones sociales y se sienten cómodos en ese mundo.

Valoran a los líderes que promueven las relaciones, el equipo y la camaradería. Y ven innecesario el control y la exigencia de otros estilo de liderazgo.